domingo, 9 de diciembre de 2007

Convencerse

No viene mal, de vez en cuando (¿por qué no siempre?), un poco de amor propio. Como escribió, alguna vez, Ernesto Cardenal:
"Al perderte yo a ti,
tú y yo hemos perdido:
yo, porque tú eras
lo que yo más amaba,
y tú, porque yo era
el que te amaba más.
Pero de nosotros dos,
tú pierdes más que yo:
porque yo podré amar a otras como te amaba a ti,
pero a ti nadie te amará como te amaba yo".


M. Sztejn