jueves, 2 de agosto de 2007

Cuanto más te doy, más me queda

Romeo y Julieta desde la mirada de Mario Benedetti, en La vida ese paréntesis...


Romeo de hogaño

No me sirven estos ojos para mirarte
son demasiado tímidos y miopes
habrá que adiestrarlos para que te lean
cuando sonríes desde tu neblina
o dices adiós como quien dice quédate

no me sirven estos ojos porque parpadean
y a ti hay que mirarte sin tregua ni respiro
ya que de lo contrario eliges diluirte
en suspiros presagios y distracciones
y entonces nadie sabe a dónde te escabulles

no me sirven estos ojos porque a veces
a pesar de mi oficio de nictálope
no puedo adivinarte en tu balcón
cuando asumes la pena y el fracaso
de esta boca que no llega a tu boca

no me sirven estos ojos ni esta linterna
ni aun este sencillo proyecto de lujuria
a lo mejor no estás / a lo peor no existes
julieta favorita de mis huesos antiguos
quimera de mi afán y mi acabóse


El balcón de Julieta en Verona, Italia

M. Sztejn

No hay comentarios: